Parte de los camiones cisternas que esta mañana comenzaron a distribuir agua potable en sectores de Santiago.

SANTIAGO.- A pesar de que el pasado fin de semana se registraron constantes lluvias en esta ciudad y zonas vecinas, las mismas no incidieron lo suficiente para permitir que los embalses de las presas Tavera-Bao acumularan agua suficiente para enfrentar el déficit del líquido que afecta a los residentes aquí y en Moca.

Como consecuencia del incremento de la situación, desde la mañana de este lunes la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago agregó 30 camiones cisternas a la labor de llevar agua hasta los sectores santiagueros más necesitados.

Los camiones son llenados en el área que para tales fines tiene CORAASAN en la parte frontal de su edificio administrativo, localizado en la avenida Circunvalación Sur, por el sector Nibaje.

Hasta este momento la empresa acuífera solo disponía de siete unidades pero, debido a la persistencia de la crisis, se decidió llevar el líquido a los lugares donde por días sus moradores no lo reciben de manera normal.

Héctor Jáquez, gerente de operación y mantenimiento de agua potable de CORAASAN, informó este lunes que la captación de agua en los embalses de esas presas fue prácticamente insignificante, producto de las lluvias del fin de semana.

Explicó que las cotas de esos lugares apenas subieron 50 centímetros, amaneciendo este lunes en un poco más de 113.40, pero que eso en nada incide para el inicio de la solución del problema.

Precisó que aunque en ciudades como Santiago, Moca y La Vega entre viernes y domingo llovió de manera contínua, aunque no torrencial, en la cordillera Central las lluvias fueron pocas.

“Producto de esa situación CORAASAN comienza a implementar la estrategia de suplir el líquido a través de los camiones cisternas y estamos esperanzados en que las presas comiencen a almacenar agua en los próximos días”, agregó Jáquez.