Un gran jurado decidió que no hay pruebas suficientes para acusar al agente Darren Wilson.
WASHINGTON.- Darren Wilson, el policía blanco que mató al joven afroamericano Michael Brown este agosto en Ferguson (Misuri), seguirá libre y sin cargos después de que un gran jurado concluyera hoy que no hay pruebas suficientes para imputarlo, anunció el fiscal del condado de San Luis, Robert McCulloch.
El área de Ferguson, en San Luis, está bajo máxima alerta, con el FBI y la Guardia Nacional preparados para intervenir si las protestas convocadas para esta noche derivan en fuertes disturbios como los que vivió esta pequeña localidad tras la muerte de Brown el 9 de agosto.
El gran jurado decide si hay pruebas suficientes para presentar cargos contra una persona, por lo que tras su decisión el caso de Wilson queda cerrado por esta vía.
Así reaccionó la mamá de Brown, Lesley McSpadden:
Tras escuchar la versión de 60 testigos, el gran jurado decidió que no existe «causa probable» para imputar al agente, que el 9 de agosto disparó en repetidas ocasiones al joven de 18 años, desarmado, en circunstancias por esclarecer.
No obstante, continúa la investigación del Departamento de Justicia sobre si hubo una violación de los derechos civiles en un caso en el convergen dos debates clave: la discriminación racial y la violencia policial.
La familia del joven expresó «su profunda decepción» tras conocer el fallo pero pidió a los manifestantes que eviten los altercados: «responder a la violencia con violencia no es la respuesta», señalan en su nota.