SANTIAGO.- Para el seminario católico Camino, vocero del Arzobispado de esta ciudad, a pesar de la reducción registrada en las últimas 27 semanas en los precios de los combustibles, la población en sentido general no ha sido beneficiada en la misma proporción, de lo que acusa al gobierno y los comerciantes.
A través del editorial de la edición de este domingo, titulado “La ley del embudo”, la Iglesia Católica es de opinión de que los transportistas de carga y pasajeros “parecen no darse por enterados de esta nueva realidad, porque la disminución que han hecho al pasaje no se deja sentir, y algunas rutas lo dejaron como antes”.
“No olvidemos que cuando el precio del barril del petróleo se puso por las nubes ellos inmediatamente traspasaban a los productos esta alza, haciendo la carga más pesada a los consumidores”, razona Camino.
Y agrega que era frecuente ver en supermercados, farmacias, tiendas, y otros establecimientos, el cambio apresurado de los precios, lo que asegura se hizo una rutina.
“Pero resulta que ahora ante el desplome del mercado petrolero no encontramos esa misma actitud de asignar los nuevos precios ajustándolos a la realidad”, se queja el vocero escrito del Arzobispado santiaguero.
Para a seguidas agregar que “es que el afán de lucro y de amasar fortuna a costa del sufrimiento y miseria de los más débiles parece ser el signo de algunos actores de esta sociedad que han hecho del dinero y el poder su dios” y que “el individualismo está llegando a su máxima expresión de deshumanización”.
Al tiempo de considerar que la sociedad dominicana no puede continuar por ese derrotero, Camino estima que el Estado “no puede hacerse cómplice de esta acción que deja a merced de los especuladores la calidad de vida de nuestra gente”, por lo que recomienda tomar medidas rápidas para frenar la especulación.
“No comencemos el año apadrinando malas acciones, conductas engañosas y manipuladoras cometidas por sectores que parece importarles poco el futuro del país”, sugiere el semanario a las autoridades gubernamentales.
En tal sentido, pide recordar que la justicia es el nuevo nombre de la paz y que es eso lo que quiere para el pueblo dominicano en el 2015 y siempre. “Eliminemos la ley del embudo, lo ancho para ellos y lo estrecho para uno, porque así no se construye patria, pues ese es el camino más peligroso para llegar al abismo social y es la expresión más fehaciente de la violencia institucionalizada que tanto daño nos ha hecho”, agrega.