El servicio de base de datos Q Scores publica dos informes al año, en enero y julio, sobre los niveles de popularidad de sobre 1,800 personalidades del mundo, vivos o muertos.
¿Y qué encontró acerca de la intérprete de “Adore You” y la voz de “Beauty and a Beat”? Pues, que las sacadas de lengua y el “twerking” o modo de moverse de Cyrus en los pasados premios VMA y el exceso de alcohol, problemas con la justicia y las malacrianzas del chico canadiense, no le simpatizan a todo el mundo.
De acuerdo, con la mencionada firma, entre los adultos de 18 a 49 años, Bieber ha perdido atractivo de manera significativa, lo que podría obstaculizar su paso a conquistar nuevos segmentos del público, más allá de las adolescentes. En el caso de Miley, el demográfico denominado “tweens”, que comprende personas entre los 10 y los 12 años de edad ha mostrado un claro rechazo hacia la otrora “Hannah Montana”. Pero quizás su estrategia de alejarse de su imagen de estrella infantil esté surtiendo efecto, pues es en el segmento de hombres entre 18 a 49 años de edad ha incrementado en popularidad, motivado por sus atrevidos movimientos y gestos en sus presentaciones personales y su desnudo en el vídeo del tema “Wrecking Ball”.
En contraste con Bieber y Cyrus, Q Scores encontró que Taylor Swift, la cantautora pop surgida del country y convertida en megaestrella musical, ha fortalecido su imagen positiva en todos los demográficos.