SANTIAGO.- El carnaval santiaguero arrancó con gran entusiasmo en la zona monumental, a la que concurrieron cientos de personas, ávidas de reencontrarse con los tradicionales lechones, y las más originales comparsas y personajes reflejando expresiones de la cotidianidad social local, nacional, y en ocasiones de incidencias internacionales.
Los organizadores del mismo, con el comunicador César Hernández en la dirección del montaje, indicaron que para esta ocasión, el evento espera llamar a más seguidores, porque han recibido todo el apoyo de las distintas instituciones que se identifican que este período del año, que brinda a las personas un positivo escape a varias presiones que les circundan.
Dijeron, que hay innovaciones de temas, más organización y mucha diversidad de colores, que fueron expuestos en el debut del presente año, lo que satisface el trabajo e interés puesto por todos los que están inmersos en brindar un gran espectáculo.
Una de las representaciones carnavalezcas.
Resaltaron personajes, como la famosa “Roba la Gallina” que interpreta el folclorista Raudy Torres; “Los Lechones de dos de los primeros barrios de la ciudad, como Los Pepines y La Joya”, y demás figuras características santiaguenses, las cuales desfilaron por todas las áreas y tarimas de exhibición, lo cual permitió que la masa del público, desde diferentes ángulos, pudiera apreciar la autenticidad y originales propuestas.
Se pudo apreciar nuevos disfraces, novedosas imitaciones de gentes famosas, entre ellas políticos, además de una mejor estructura organizacional, para el disfrute de miles de visitantes a las calles circundantes al monumento a los Héroes de la Restauración y la avenida Las Carreras, que comprenden la zona del Carnaval santiaguero.
Hernández, resaltó que la fiesta de Carnaval es tradicional en Santiago, sobresaliendo por la rica diversidad, y en su centro es notable la presencia de cómicos-satíricos que se burlan de su propia situación de vida. Como es tradicional, surgen personajes populares que encarnan el panorama, aspecto de muchos barrios y comunidades pobres del país, entre estos; los tiznados con grasa de vehículo, otros se embarran de lodo, algunos que se creen ricos opulentos, y otros que simplemente, les da por imitar a personas que lloran por paga en los cementerios y velorios, sin faltar personas trastornadas mentales, que se muestran como son.
La transmisión del evento se lleva a través de Medios Unidos del Cibao (MUCI), conjunto de canales televisivos, que han logrado impactar positivamente en el relanzamiento de la única fiesta en la que convergen todas las clases sociales.
