SANTO DOMINGO.- Este año se filtró en la prensa que Guillermo Cordero sería parte del equipo de producción para ejercer la función de director artístico de los Premios Soberano, que organizan la Asociación de Cronistas de Arte y la Cervecería Nacional Dominicana, pero ha dicho que aún no ha recibido la invitación.
Guillermo Cordero es de los otros tantos artífices de los Premios Soberano (antes Casandra) que dio esplendor y marcó con su creatividad y estilo la producción, logrando llevar a escena siete montajes y como artista obteniendo 29 estatuillas, incluido El Gran Soberano.
En 1994 tuvo su primera oportunidad para producir los premios. Antes ya había realizado dos entregas de los premios El Dorado (1985- 1986 en el Palacio de Bellas Artes). Para la época, aunque era muy joven, ya era un experimentado y referencia en el país en montajes y producciones de espectáculos, en un tiempo en el que los artistas invertían en llevarle al público conciertos y montajes de calidad en importantes escenarios.
Para ese entonces el premio era producido por la publicitaria Jonas Rubicam Damaris, y fue quien confió a Cordero el ceremonial de ese año que tuvo como presentadores a Freddy Beras Goico, Cecilia García y Yaqui Núñez del Risco.
“Yo venía de tener un año de éxitos con la presentación de varios espectáculos y no era un terreno extraño para mí por la experiencia que tenía”, expuso.
Esa fue la primera vez que la producción artística acogió un concepto y fue dedicado a todos los artistas dominicanos que habían logrado el éxito a nivel internacional. “Ese año también se hizo el primer homenaje póstumo a Eduardo Brito y a María Montez”, recordó.
También se implementó para el evento una majestuosa escenografía que logró Fidel López y con la que dio inicio a su carrera de manera profesional. Lo mismo sucedió con Leonel Lirio con su carrera como diseñador de moda.
Parte del esplendor que le imprimió Cordero a la premiación, en 1994 se consagró al obtener, esa noche, tres estatuillas y El Gran Soberano. “Fui reconocido por Espectáculo del Año, Concierto del Año, Coreógrafo Popular y distinguido con El Soberano, como se le denominaba a la máxima distinción”, recordó.
