Los implicados en casos de pedofilia en Gran Bretaña serán sometidos a “castración química”, esto como parte de un nuevo programa que se busca expandir en todas las prisiones británicas.
Seis prisiones han ofrecido distintos grupos de privados de libertad por abusos de menores para que obedezcan a un tratamiento que busca eliminar su interés sexual y comportamiento obsesivo mientras cumplen sus sentencias en los reformatorios.
Esta polémica medida es implementada para atacar la ola de reportes de ataques sexuales en la nación, los cuales han incrementado en los últimos años. Esta idea fue sugerida por primera vez en el año 2008 antes de ser probado en la cárcel HMP Whatton.
Por su parte, más de 90 internos de la prisión de Nottinghamshire han sido tratados bajo este proyecto, de los cuales muchos de ellos han decidido irse por la “castración química”. Los que tomaron este camino, han comentado que las drogas han alejado completamente sus deseos sexuales.
Soportes académicos de este tratamiento concluyen que las personas que han perpetrado esta clase de delitos y no son tratados, son ocho veces más propensos a cometer crímenes similares luego de ser liberados con respecto a los que si han pasado por el programa.
