El director Nuri Bilge Ceylan recibió el premio en manos de Quentin Tarantino y Uma Thurman.
Este 2014, la organización del Festival de Cannes se lo ha puesto muy difícil a los especialistas en interpretar la alfombra roja de su ceremonia de clausura. Tradicionalmente, todos los rostros conocidos que aparecían en La Croisette habían regresado a la ciudad para recibir premio, pero esta vez hubo directores de la sección oficial que se fueron de vacío tras presenciar la gala. Nadie sabía quién se llevaría el premio gordo, la preciada Palma de Oro, y el turco Nuri Bilge Ceylán era solo uno de los seis directores que podían subir a recogerla. Pero así lo hizo. Desde antes de que empezara la muestra, ya se cacareaba en los mentideros del cine que su larguísima película’Winter sleep’ [‘Sueño de invierno’] olía a premio, y el jurado presidido por Jane Campion ha hecho realidad ese pronóstico.
Con una duración de tres horas y 16 minutos, la cinta cuenta la historia de un exactor que regresa al hotel de su familia en la Capadocia, y allí irá invadiendo poco a poco el espacio y las vidas de quienes le rodean. “Quiero dedicar el premio a los jóvenes de Turquía”, decía emocionado Ceylan tras recibir el premio de manos de Quentin Tarantino y Uma Thurman, “a aquellos que perdieron su vida durante el pasado año”. Las otras dos grandes aspirantes a la Palma de Oro tuvieron que conformarse con premios algo menores. La rusa’Leviatán’, del director ruso Andrey Zvyagintsev, que realiza una monumental crítica al sistema burocrático y retrata la ansiedad humana, se quedó con el galardón al Mejor Guión; la canadiense ‘Mommy’, esa fábula histriónica sobre la maternidad del joven Xavier Dolan, compartió el Premio del Jurado -el tercer premio- con la última cinta de Jean-Luc Godard, ‘Adieu au langage’.
Julianne Moore y Timothy Spall
El segundo premio más importante de la noche, llamado el Gran Premio del Jurado, fue a parar a las manos de una directora [en el año en que Cannes se ha volcado con la presencia femenina en el festival]. Alice Rohrwacher ha recogido el galardón para ‘Le meraviglie’, una historia inspirada en su infancia, en un entorno rural italiano en el que una familia cría abejas y fabrica miel. El Mejor Actorde la muestra ha sido el británico Timothy Spall, que interpreta al pintor protagonista de ‘Mr. Turner’, de Mike Leigh; el premio a la Mejor Actriz ha recaído en una ausente, Julianne Moore, que borda el papel de una estrella en declive en el Hollywood de ‘Maps to the stars’, de David Cronenberg.
El Mejor Director, según el jurado, ha sido el estadounidense Bennett Miller. Con ‘Foxcatcher’, el artífice de ‘Capote’ o ‘Moneyball’ realiza un afinado retrato sobre la perversión de un poderoso millonario, interpretado por Steve Carell. La mejor ópera prima, galardonada con la Cámara de Oro, fue la película’Party Girl’, la encargada de abrir la sección paralela ‘Una cierta mirada’. La Palma de Oro al mejor cortometraje, entregada por el iraní Abbas Kiarostami, fue a parar a la obra colombiana ‘Leidi’, de Simón Mesa Soto.
