WASHINGTON – El soldado puertorriqueño Iván López López, cuyas raíces están en el municipio de Guayanilla, ha sido identificado como el autor de la masacre de ayer en el fuerte Hood de Texas, suceso en el que, según portavoces militares, dio muerte a tres personas e hirió a 16 antes de quitarse la vida, confirmaron dos fuentes cercanas a su familia.
Anoche, el general Mark Milley, del fuerte Hood, no ofreció el nombre del soldado, pero las fuentes de El Nuevo Día confirmaron que se trata del militar puertorriqueño, quien fue miembro de la banda escolar de Guayanilla y de la Guardia Nacional de Puerto Rico.
“Era percusionista. Estudió en la escuela Asunción Rodríguez de Sala, en Guayanilla”, dijo una fuente.
López llegó al fuerte Hood en febrero pasado.
El autor de la masacre, asignado al comando de apoyo 13 del Ejército de Estados Unidos,estuvo cuatro meses de 2011 asignado a Irak. Aunque no quedó con heridas físicas, sí resultó con “problemas sicológicos”, dijo el general Milley.
“Estaba bajo tratamiento por problemas siquiátricos y alcoholismo”, agregó Milley, quien sostuvo que “no hay indicaciones” de que haya sido un acto de terrorismo.
Las fuentes de El Nuevo Día, que lo conocen desde joven, sostienen que el militar, de 34 años, perdió a su madre en noviembre pasado. El mes antes murió su abuelo.
“Fueron muchos golpes”, señaló una de las fuentes.
López López utilizó una pistola semiautomática para dar muerte a las víctimas. Se cree que el incidente surgió por una disputa con otro soldado.
Su esposa reside en la zona de la instalación militar, que pertenece al Ejército de Estados Unidos. También informaron que tiene hijos, aunque no precisaron cuantos.
Una militar habría hecho frente al atacante, quien se quitó la vida en un estacionamiento de la instalación, agregó Milley.
Este es el segundo ataque en cinco años en el Fuerte Hood. El anterior, ocurrido en 2009, dejó 13 muertos y 30 heridos.
“Estamos devastados de que algo así quizás haya ocurrido de nuevo. No quiero comentar los hechos hasta que no sepamos exactamente qué ocurrió», dijo el presidente Barack Obama, quien estaba en Chicago en eventos de recaudación de fondos para el Partido Demócrata de Estados Unidos.
Advierte de los problemas mentales de los veteranos
WASHINGTON.- El comisionado residente en Washington, Pedro Pierluisi, expresó hoy su pesar por la matanza de ayer en el fuerte Hood y subrayó la necesidad de que el gobierno federal preste más atención a los servicios de salud mental para los soldados que regresan de las guerras.
“Estoy profundamente entristecido por los trágicos eventos ocurridos ayer en el fuerte Hood. Mis oraciones y pensamientos están con las víctimas y sus familiares”, indicó Pierluisi en un comunicado de prensa.
Para Pierluisi, “aunque no hay excusa para la violencia, un evento de esta naturaleza subraya cuán importante es para nosotros como nación hacer todo lo posible para asegurar que nuestros hombres y mujeres en uniforme, particularmente lo que han servido en combate, obtener los servicios de salud mental apropiados”.
Las autoridades militares han indicado que el supuesto autor de la masacre que dejó cuatro muertos y 16 heridos, el puertorriqueño Iván López López, tenía problemas sicológicos y mentales, después de haber estado cuatro meses en Irak.
Acción de soldado boricua desconcierta a los que lo conocieron
El soldado Iván López pasó casi una década en la Guardia Nacional, prestó servicio como pacificador en la península del Sinaí y fue policía.
GUAYANILLA, Puerto Rico – Creció en Puerto Rico, tocó percusiones en la banda musical de su escuela secundaria, pasó casi una década en la Guardia Nacional, prestó servicio como pacificador en la península del Sinaí, trabajó como policía y después se unió al ejército de Estados Unidos.
Esa fue la ruta al parecer ordinaria de Iván López hacia las fuerzas armadas. Pero lo que ocurrió a partir de ahí —y la razón por la que el soldado de 34 años se volvió contra sus camaradas con tal furia letal— era un misterio el jueves.
Un día después de que López realizó un ataque mortal indiscriminado en la base del ejército en Fort Hood, Texas, en el que mató a tres personas y lesionó a 16 antes de suicidarse, algunas de las personas que lo conocieron estaban desconcertadas por la explosión de violencia.
«Él tenía muchos amigos. Nunca lo vi peleando. Nunca pareció ser un muchacho que tuviera problemas emocionales», dijo Edgardo Arlequín Vélez, alcalde de Guayanilla, quien además fue el líder de la banda musical escolar en la que López participó en este pequeño poblado de gente de clase trabajadora.
Ejército también asegura que soldado boricua no era violento
No solo los vecinos describen como una persona pasiva a Iván López, el puertorriqueño autor del tiroteo de este miércoles en Fort Hood en Texas.
El secretario del Ejército estadounidense, John McHugh, indicó hoy que López no tenía tendencias suicidas o violentas pese a estar bajo vigilancia psiquiátrica.
«Fue visto el mes pasado por un psiquiatra. Fue examinado a fondo y hasta el momento no tenemos indicios en el historial de las citas de que hubiese señales indicativas de violencia, tanto contra él como contra otros. El plan que se consideró apropiado era seguir vigilándole y tratándole», indicó McHugh en una audiencia en el Senado.
El general Ray Odierno, jefe militar de las tropas de tierra, aseguró hoy que el autor del tiroteo con cuatro muertos en la base de Fort Hood, incluido él mismo, era un militar «muy experimentado» que no entró en combate en Irak y no sufrió heridas cerebrales, y que estaba en activo.
Odierno detalló que López, que se suicidó tras el tiroteo, había pasado nueve años en la Guardia Nacional de Puerto Rico, trabajó como miembro de la fuerza de paz en la península del Sinaí (Egipto) durante un año y fue conductor de camiones en Irak para los estadounidenses durante cuatro meses.
«Era un soldado muy experimentado con un año de despliegue en el Sinaí con la Guardia Nacional y cuatro meses en Irak», explicó Odierno en la audiencia del Comité de las Fuerzas Armadas del Senado.
López vivía fuera de la base de Fort Hood, una de las más grandes de Estados Unidos y escenario en noviembre de 2009 de la peor masacre en un centro militar estadounidense, cuando Nidal Malik Hasan, un psiquiatra del Ejército con ideas extremistas islamistas mató a 13 personas e hirió a 30.
McHugh explicó que en el caso de López, un soldado en activo que perpetró el tiroteo con una pistola de calibre 45, no se ha determinado hasta el momento ninguna conexión «con organizaciones extremista de ningún tipo».
No obstante, el Pentágono mantiene abierta la posibilidad del terrorismo extremista hasta que la investigación sobre las motivaciones avance.
«Hasta el momento, tenemos un historial limpio en términos de comportamiento, no hay marcas negativas de ningún tipo ni indicaciones de mala conducta», explicó McHugh.
Puertorriqueño una de las víctimas de la matanza en Texas
El militar era de Aguadilla y vivía cerca del Fort Hood
Una de las tres víctimas de la matanza ocurrida en la base militar Fort Hood, en Texas es de origen puertorriqueño y con familia en el pueblo de Aguadilla.
La tía del militar, Bernardina Lassarinni, confirmó que hoy en la mañana sus familiares en Tampa, Florida recibieron la noticia del asesinato de Carlos Lazaney.
“El papá está muy enfermo y no se le ha podido dar la noticia”, dijo la mujer en entrevista telefónica con este diario.
Lazaney fue una de las tres víctimas de una balacera que originó el también militar boricua, Iván López López.
Lassarinni dijo que su sobrino, de 38 años, ingresó en la milicia al cumplir 18 años. Su familia inmediata, sus padres y sus tres hermanos residen en Tampa, Florida en donde aguardaban por más noticias.
“Están bien afectados”, sostuvo la mujer.
El alcalde de Aguadilla, Carlos Méndez,fue el primero en alertar de que uno de los muertos en la base militar era un aguadillano.
Méndez sostuvo que una tía de Lazaney, que no identificó, se comunicó con él para dejarle saber de la fatídica noticia.
“Es una persona del barrio Villa Alegría, pero creo que la familia iba y venía de Estados Unidos a Puerto Rico. Son gente buena, yo los conozco”, sostuvo el alcalde.
Calificó a la familia del militar como “una muy buena” y con raíces en el pueblo de Aguadilla.
Aseguró que aún es poca la información que se tiene sobre este particular.
López López comenzó un tiroteo en la base militar y tras matar a tres personas y herir a otras 16, se suicidó.
López López, de 34 años, había sido trasladado en febrero a la base militar Fort Hood, en Texas, proveniente de otra base militar en el mismo estado. Estuvo cuatro meses destacado en Irak en 2011 y se mantenía asignado al Comando de Apoyo 13 de una unidad de logística y apoyo, en Fort Hood. Según la información que difundió el Ejército, López López tomaba medicamentos y recibía asistencia psiquiátrica contra la depresión y la ansiedad. Además, era evaluado para determinar si tenía trastorno de estrés postraumático.