Monseñor Diómedes Espinal de León, obispo de la diócesis Mao-Montecristi, corta la cinta junto a la fiscal maeña, Sonia del Carmen Espejo.
SANTIAGO.- La Procuraduría Fiscal de Valverde y la Pastoral Penitenciaria la Iglesia Católica, inauguraron en Mao la Casa del Redentor “Padre Juan Nepomuceno Zegrí”, donde se ofrecerán programas de reinserción social a las personas que han obtenido su libertad, luego de cumplir condenas en los diferentes centros penitenciarios de la zona.
La iniciativa tiene como finalidad contribuir con la reinserción familiar y social de los exinternos, ofrecerles apoyo espiritual y fomentar su participación en programas de formación cristiana.
El nuevo establecimiento funcionará en coordinación con el Centro de Corrección y Rehabilitación de Mao y la diócesis Mao-Montecristi, con el apoyo de las juntas de vecinos en labores de prevención de los delitos en las comunidades, haciendo énfasis en la atención y orientación de los niños, niñas y adolescentes.
En el acto, la procuradora fiscal titular de Valverde, Sonia del Carmen Espejo, aseguró que con esta iniciativa, que cuenta con el apoyo y colaboración del procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito.
Dijo que con esto se contribuye “a mantener la paz en la provincia al mismo tiempo se fortalecen los planes desarrollados en ese sentido, porque involucra a la sociedad en la lucha contra los hechos delictivos en la región”.
Tras definir como “un significativo aporte” para la reincorporación positiva a la sociedad de los que por diferentes motivos han estado en condición de privación de libertad, Espero considero que ayudará a fortalecer los programas de prevención de las actividades delictivas.
El acto inaugural contó con la presencia de monseñor Diómedes Espinal de León, obispo de la diócesis Mao-Montecristi; el padre Fray Arístides Jiménez Richardson, coordinador de la Pastoral Penitenciaria de la Iglesia Católica; Víctor González, procurador general titular de la Corte de Apelación de Santiago, y el gobernador provincial, Domingo Colón.
Tanto el obispo Diómedes Espinal como Arístides Jiménez Richardson coincidieron en que la Casa del Redentor es un aporte al compromiso que tiene la Iglesia Católica de ayudar para que aquellos que están privados de libertad puedan reinsertarse en la sociedad e invitaron a las instituciones a sumarse al proyecto.