Con casi 300 personas todavía desaparecidas, tras el hundimiento de un ferry lleno de estudiantes frente a la costa de Corea del Sur, empiezan a surgir los primeros reportes de mensajes de texto enviados por los que quedaron atrapados.
«Esta debe ser mi última oportunidad para decirte que te quiero», escribió el estudiante Shin Young-Jin a su madre desde el buque.
«Yo también te quiero», le respondió su madre, claramente ajena a la crisis desatada en el barco en el que viajaba su hijo.
Según el diario Korea Herald, Shin Young-Jin figura entre las 179 personas rescatadas del barco que transportaba a un total de 462 pasajeros, hasta el momento se han reportado un total de 20 fallecidos.
«El barco está muy inclinado»
Pero muchos otros padres que recibieron este tipo de mensajes no han tenido la misma suerte.
La agencia AFP reportó otro intercambio de mensajes con estudiantes a bordo.
Estudiante: «Papá, no te preocupes. Estoy llevando un chaleco salvavidas y estoy con otras chicas. Estamos dentro del barco, todavía en el vestíbulo».
Padre: «Sé que el rescate está en camino. ¿Pero no tendrías que estar esperando fuera en la barandilla? Trata de ir si puedes».
Estudiante: «El barco está demasiado inclinado. El vestíbulo está lleno de gente».
La estudiante que envió estos mensajes sigue desaparecida.
«Haz lo que te digan»
Otro intercambio publicado en los medios surcoreanos fue entre un estudiante y su hermano cuando el barco empezó a tener problemas.
Estudiante: «El barco chocó contra algo y no se está moviendo. Dicen que la guardia costera acaba de llegar».
Hermano: «No entres en pánico. Tan sólo haz lo que te digan y todo estará bien».
Pero no se volvió a dar ninguna comunicación.
Un superviviente dijo que «hubo un anuncio ordenándonos permanecer quietos, pero el ferry ya se estaba hundiendo».
Algunos padres permanecieron en contacto con sus hijos por teléfono hasta que las líneas se cortaron.
Park Yu-Shin, cuya hija se encuentra entre los desaparecidos, le dijo a AFP que habló con su hija mientras ésta lidiaba con la emergencia.
«Me decía: nos estamos poniendo los chalecos salvavidas. Nos dicen que esperemos y nos quedemos quietos, así que estamos esperando. Puedo ver un helicóptero», dijo Park, cuya hija todavía está entre los desaparecidos.
«Quería vivir»
Todavía no está claro que provocó el hundimiento del ferry, que transportaba en su mayoría a estudiantes, pero los supervivientes aportaron testimonios similares sobre lo que pasó este miércoles, así como las escenas de caos que se vivieron a bordo.
«Hubo un fuerte ruido y el bote empezó a hundirse inmediatamente por un lado», dijo Kim Song-Muk, uno de los pasajeros rescatados.
«La gente se amontonó para alcanzar la escotilla exterior, pero era difícil con el barco volcado hacia un lado».
El estudiante Lim Hyung-min narró cómo saltó al océano con otros jóvenes llevando un chaleco salvavidas y nadó hacia un bote de rescate cercano.
«Como el ferry estaba temblando e inclinándose, tropezábamos y chocábamos unos contra los otros», dijo Lim, añadiendo que algunas personas estaban sangrando.
Una vez saltó al océano «estaba tan frío.. Me apuré, pensando que quería vivir».
Críticas al rescate
Imágenes de la escena mostraron a equipos de rescate en el ferry accidentado sacando a adolescentes por las ventanas de las cabinas, mientras que otros saltaban al mar a medida que el barco se hundía.
El pasajero Koo Bon-Hee, de 36 años, contó a la agencia AP que mucha gente quedó atrapada dentro porque las ventanas eran muy difíciles de romper.
Él quería escapar antes pero el anuncio pidió a los pasajeros que se quedaran quietos. Ko Bon-Hee criticó el rescate, alegando que hubo tiempo suficiente para evacuar a los pasajeros y que muchos habrían sobrevivido tan sólo saltando al mar y esperar ser rescatados.
Otro superviviente dijo a la televisión local: «El anuncio nos dijo que nos quedáramos quietos, pero el barco ya se estaba hundiendo y habían muchos estudiantes que todavía no habían salido del barco».
Kim Seong-mok dijo a la televisora coreana YTN que estaba «seguro» de que mucha gente estaba atrapada dentro del barco cuando el agua se empezó a filtrar rápidamente y la inclinación del barco les impidió llegar a las salidas.
Heroína
También se han dado reportes de actos heroicos a bordo.
Se ha dicho que una integrante de la tripulación, Park Ji-young, de 22 años, perdió su vida cuando trataba de asegurarse de que todos los pasajeros de los pisos superiores llevaran chalecos salvavidas y encontraran la salida.
«Le pregunté varias veces por qué no llevaba primero un chaleco salvavidas. Park sólo dijo que saldría del barco después de asegurarse de que todos los pasajeros estaban fuera», dijo un superviviente a medios locales.
«Park empujó a los conmocionados pasajeros hacia la salida incluso cuando el agua le llegaba al pecho».
Según reportó el Korea Herald, la joven empezó a trabajar para la compañía en 2012, para apoyar a su familia con su sueldo.
Cuando su cuerpo llegó al hospital, dijo el medio, su madre gritó: «No puedo creer que nos hayas dejado».