El Cártel de Sinaloa (en azul en el mapa) se convirtió durante la dirección de Joaquín «El Chapo» Guzmán en el de mayor influencia en México. Sus miembros controlaban Ciudad Juárez y atacan puntualmente zonas dominadas por otros clanes.
Junto a sus mayores enemigos, los Zetas, controlan el 80% del narcotráfico mexicano. Una porción del pastel que intentan aumentar mediante matanzas que sirven para enviar mensajes y amedrentar a los opositores y a las fuerzas estatales de seguridad.
