Los novios celebraron su última noche como solteros en el palacio con una fiesta que terminó entre fuegos artificiales.
Pese a que Kim Kardashian había dicho que su segunda boda, la que esta noche le unirá con el rapero Kanye West, iba a ser más íntimaque la primera, la que la desposó con el jugador de baloncesto Kris Humphries, las celebraciones previas a la boda hacen pensar que su enlace será un derroche del lujo por el lujo.
Kim y Kanye contraerán matrimonio en unas horas en un palacio de Florencia y la expectación es máxima. La pareja viajó junto a su círculo íntimo hasta París hace una semana para ultimar los preparativos del enlace y, basicamente, salir de fiesta, que es a lo que se dedican las Kardashian… También tienen un programa de televisión.
El pasado jueves Kim celebró junto a sus familiares y amigas una especie de despedida de soltera. Una veintena de mujeres tomaron las calles parisinas para organizar una divertida velada a la futura novia. Mientras que todas vestían de oscuro, Kim optaba por un ajustadísimo diseño en tonos claros firmado por Balmain. Reina del exceso, el diseño llevaba piedras cosidas, perlas incrustadas y flores bordadas.
El viernes, para celebrar la última noche de noviazgo con Kanye, la pareja cerró el palacio de Versalles para ofrecer una fiesta a sus amigos. En esa ocasión Kim y su novio se compenetraron en los looks. Ella,con total look blanco. Vestido cuya parte de arriba emulaba a una chaqueta, escotada y con mangas que nunca cerraban, y la parte inferior era una falda recta. Él con un traje color crema, con solapas de raso y sin camiseta debajo de la chaqueta. Según hemos podido ver en las fotos publicadas en Instagram y en las captadas por los paparazzi, la fiesta terminó con un discurso de los novios y con fuegos artificiales en los jardines del palacio. Sus diseños eran de Martin Margiela y la fiesta la musicalizó Lana del Rey, cantante favorita de Kim.
Imaginamos que los Kardashian no se acostarían muy tarde, ya que hoy los novios se desposaran en Florencia. En la ciudad italiana han alquilado una fortaleza para recibir a todos sus invitados, que llegarán en jets privados. La prensa estadounidense espera que Beyoncé y Jay Z estén presentes en el enlace, incluso aventuran que Kanye quiere al cantante como padrino. Sin embargo, la enemistad entre Beyoncé y Kim puede estar por encima y que Jay Z no esté con su amigo en el altar.
