ESPAÑA.- Más de dos millones de personas, según cifras de los organizadores, se han reunido  en Madrid para protestar en contra de la política económica que ha tomado este país en los últimos años.

Los manifestantes  convocados por las llamadas “Marchas de la dignidad”  critican los “recortes” presupuestales y, bajo el lema “Pan, trabajo y techo para todos”, exigen  el resarcimiento  de los derechos que les han sido arrebatados debido a la crisis económica que ha asolado Europa.

En la página de internet www.marchasdeladignidad.org se ha publicado un manifiesto en el que se puede leer: “Tener unas manos para trabajar; tener una carrera terminada; disponer de tu capacidad tanto manual como intelectual y no encontrar un trabajo digno es humillante. Se está desperdiciando el talento colectivo de una sociedad, hipotecando indefinidamente su futuro. Los trabajadores y trabajadoras no se merecen este atropello a nuestra dignidad colectiva”.

Y es que el desempleo juvenil en España alcanza unas cifras récord: 983 mil menores de 25 años se encuentran en paro, lo que se traduce en un 57.7 por ciento del total. Uno de los efectos estructurales  de  la crisis económica europea es la incapacidad de coordinar el excedente de riqueza existente, actualmente en manos del capital financiero, con una demanda laboral creciente.

Además, entre las demandas  expresadas en las marchas del #22M se encuentra el derecho a la vivienda. Como es conocido uno de los principales problemas en el país europeo es la crisis hipotecaria que ha dejado a miles de españoles sin vivienda y, además, endeudados con los bancos.

Los manifestantes también critican la falta de independencia del gobierno del Partido Popular (PP) pues, desde su perspectiva, las políticas de ajuste y recortes obedecen a las demandas del Fondo Monetario Internacional o el Banco Mundial:”Estamos sufriendo las políticas ejecutadas por el gobierno del PP al dictado de la Troika (Fondo Monetario Internacional, Banco Central Europeo y Comisión Europea), consistentes en el robo de derechos y el empobrecimiento generalizado de la mayoría social.

Estas políticas que se fundamentan en el pago de una Deuda ilegítima que no han contraído los ciudadanos y ciudadanas, son producto de la especulación bancaria y los excesos de los distintos gobiernos”, señala el manifiesto.

A la embestida económica de los últimos años se suma un retroceso en materia de los derechos de las mujeres.  En diciembre pasado  el gobierno de Mariano Rajoy aprobó una reforma a la ley de aborto, la cual limita el derecho a interrumpir el embarazo libremente en las primeras 14 semanas de gestación.