RUSIA.- Moscú amenazó este sábado con suspender las inspecciones internacionales de armamento nuclear en su territorio, recogidas por el tratado sobre la reducción de armas nucleares START III firmado entre Rusia y EEUU.
«Estamos dispuestos a ese paso en respuesta a las declaraciones del Pentágono sobre la suspensión de la cooperación entre las carteras de Defensa de Rusia y EEUU» por la intervención rusa en la república autónoma de Crimea, dijo un alto cargo del Ministerio de Defensa ruso a las agencias locales.
Dado que «estas inspecciones son una medida de confianza, en las actuales condiciones de sanciones ya declaradas de facto por EEUU, no puede haber contactos bilaterales normales para el cumplimiento de los acuerdos» en materia de armas nucleares, advirtió el alto funcionario ruso.
«Las infundadas amenazas a Rusia por parte de Estados Unidos y la OTAN en relación a su política en Ucrania son vistas como una gesto marcadamente inamistoso y nos permiten actuar como en circunstancias de fuerza mayor», agregó.
El Gobierno de Estados Unidos anunció hace dos días la restricción de visados y otras sanciones contra personas y entidades responsables de la intervención militar rusa en la península ucraniana de Crimea.
Washington también ha suspendido las conversaciones bilaterales con Rusia sobre comercio e inversión, y frenó los contactos entre militares de EEUU y de Rusia, incluidos los ejercicios, reuniones bilaterales, visitas portuarias y conferencias planificadas.
El tratado sobre la reducción de los arsenales nucleares START III fue firmado en abril de 2010 y contempla que Rusia y EEUU deben reducir sus ojivas atómicas desplegadas hasta un máximo de 1.550 unidades en un plazo de siete años.
Putin insta a Obama a no sacrificar sus relaciones bilaterales
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha llamado a su homólogo de Estados Unidos, Barack Obama, a no sacrificar las relaciones bilaterales por «discrepancias sobre determinados problemas internacionales, por muy significativos que sean», ha informado el Kremlin. Así se lo expresó Putin a su colega estadounidense en una conversación telefónica que mantuvieron anoche sobre la crisis en Ucrania.
«El presidente ruso hizo hincapié en la primordial importancia de las relaciones ruso-estadounidenses para la seguridad y la estabilidad en el mundo», señala la nota oficial. Estas relaciones, agrega el Kremlin, «no deben ser sacrificadas por discrepancias sobre determinados problemas internacionales, por muy significativos que sean».
En la conversación telefónica, celebrada por iniciativa de la parte estadounidense según la Presidencia rusa, se abordó la «grave situación que se ha creado en Ucrania» y se constataron «divergencias de enfoque y valoraciones sobre las causas de la crisis y actual estado de cosas».
Putin le manifestó a Obama que las actuales autoridades ucranianas llegaron al poder como resultado de un «golpe anticonstitucional», que no tienen un mandato a nivel nacional e «imponen decisiones absolutamente ilegítimas» a las regiones sureñas, surorientales de Ucrania y Crimea. En esta situación, «Rusia no puede desoír las peticiones de ayuda y actúa de manera adecuada y en plena conformidad con las normas del derecho internacional», añade la nota.
Vía diplomática
Por su parte, Obama, comunicó a Putin las sanciones decididas por Estados Unidos e insistió en que existe todavía «un camino para solucionar» la crisis en Ucrania por vías «diplomáticas», según ha informado la Casa Blanca.
Obama reiteró que la solución pasa por que «los gobiernos de Ucrania y Rusia sostengan conversaciones directas, facilitadas por la comunidad internacional» y Moscú acepte el despliegue de «observadores internacionales que aseguren los derechos de todos los ucranianos, incluidos los de etnia rusa», en preparación de las elecciones de mayo. «El presidente Obama ha hecho énfasis en que Rusia está violando la soberanía de Ucrania», indica el comunicado presidencial.
La conversación se produjo después de que el presidente estadounidense realizase una breve declaración en la que rechazó como ilegal el referéndum planeado en la península de Crimea por los responsables prorrusos de esta región autónoma para ratificar su adhesión a la Federación Rusa. En la conversación, que se prolongó durante una hora, Obama exigió además que las tropas rusas «vuelvan a sus bases».
Por último, Obama señaló a Putin que el secretario de Estado, John Kerry, que se encuentra en Europa, «continuará las discusiones con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguei Lavrov, el Gobierno de Ucrania y otros socios internacionales en los próximos días para avanzar en estos objetivos», según el resumen facilitado por la Casa Blanca.