La cantante viaja con un ejército de expertos en belleza para aparecer siempre perfecta
Beyoncé es una de las cantantes con mayor popularidad y admiración. A sus 33 años, la artista puede presumir de ser una de las cien personas más influyentes según la revista «Time», y de que su éxito sea objeto de estudio en las universidades. Pero, además de eso, la mujer del rapero Jay-Z goza de un físico envidiado. Su perfección la hace ganar admiradores a diario. Pero eso tiene un precio.
Según la revista «Ok! magazine», el cuerpo de la cantante tiene un coste de unos mil euros al día. La sensual cantante viaja siempre con un séquito de expertas de belleza que incluye peluquera, esteticista y masajista. Además, se somete a duros entrenamientos deportivos y a rutinas de baile, con los que quema muchas calorías.
Los conciertos de Beyoncé son un espectáculo en los que la cantante no para de moverse en el escenario. Y para eso hay que estar en forma. «Tiene mucha presión para estar siempre perfecta, nunca sale de casa sin maquillar y su pelo siempre está arreglado por profesionales», ha dicho una persona del entorno de Jay-Z a la publicación estadounidense.
Con una fortuna estimada en más de 100 millones de euros, según la revista «Forbes», Beyoncé tiene muy claro que parte de ese presupuesto debe dedicarlo a su belleza. El desglose anual de sus gastos de belleza asciende a un total de 707.000 euros en tratamientos. Ese dinero se distribuye en nutricionista (48.000 euros anuales por dos visitas a la semana); entrenador personal (178.000 euros al año) y tratamientos para el cabello y la piel (que le suponen 484.000 euros anuales).
Belleza y otros placeres
Pero además de dedicar parte de su dinero a estar perfecta, Beyoncé también sabe disfrutar de la vida familiar.
En medio de los rumores que aseguran que estaría embarazada por segunda vez, Beyoncé ha comenzado el año viajando junto a su marido y a su hija Blue Ivy (3 años). Primero pasaron las navidades en Islandia, y la pareja viajó a continuación a Camboya, donde permanecieron en fin de año y en Reyes.
Pero no todos los sueños los compra el dinero. La pareja, a la que se conoce como «Los reyes de Nueva York» –por la influencia que tienen en la Gran Manzana, donde viven–, sigue buscando su casa ideal en Los Ángeles. Beyoncé y Jay-Z quieren mudarse a la ciudad californiana, atraídos por su clima benigno. Pero cuando encontraron la casa de sus sueños se la arrebató un diseñador de videojuegos que ofreció más dinero por ella.
Eso sí, viva donde viva, Beyoncé seguirá necesitando su ejército de expertos en belleza para lucir tan guapa como siempre.